lunes, 19 de marzo de 2018

POEMA 5


COMO LA LLUVIA QUE REFRESCA Y CALMA...







Ya yo estaba cansado de ser piedra,



vaga idea, ausencia, erial.



Ya yo estaba al borde de buscar la nada



como única puerta de escape



a tanto desamparo.



Ya yo estaba convencido del encuentro imposible...



y apareciste tú, sin previo aviso,



como la lluvia que refresca y calma,



aquella tarde de ningún presagio que no fuera



mi rutina lúcida.



Apareciste tú y en esos ojos tan de todos



a quienes regalas el placer de contemplarlos



vi un amanecer lleno de copos



de la nieve eventual, tan blanca como hermosa,



y golpeaste mi tiempo rescatándolo



de toda abulia posible y absurda.



Y a partir de entonces



cuando me amenaza la congoja del atardecer



me acuerdo de tus ojos que destilan amor y ternura



y de tu sonrisa que se abre ante el mundo



como una alfombra persa...



y me pregunto, ¡ay!, cómo pude vivir hasta hoy



sin conocerte...







Augusto Lázaro






No hay comentarios:

Publicar un comentario